Diego no se imaginaba cómo le iba a cambiar la vida de un día para otro. Hace cuatro años este joven estadounidense perdió su casa debido a una relación sentimental fallida y se vio obligado a vivir como indigente.
A través de Facebook, entabló amistad con su jefe Cory, quien le ofreció trabajo si se mudaba a Denver.
En aquel entonces, poco sabía Diego de la suerte que le traería aquella mudanza. Hoy, cuatro años después, es el ganador de la lotería Scratch Wonka’s Golden Ticket, de Colorado, Estados Unidos, lo que le ha otorgado un premio de 250.000 dólares.
El equipo de la Lotería fue a su trabajo y le entregó un gran cheque. Lleno de emoción, Diego cayó de rodillas llorando, sin poder creer lo que estaba pasando. “Voy a hacer feliz a mucha gente” expresó Diego aún con lágrimas en los ojos, “no creo que me lo merezca”.
Entre sus planes, sobre qué hacer con el premio, está comprarle juguetes a su hijo de 6 años y destinar una parte del premio al servicio de Parques Nacionales de Estados Unidos.
Foto de La Voz
Pero no es la primera vez, que algo así ocurre. En 2014 un indigente Húngaro László Andraschek, de camino a la reunión de alcohólicos anónimos, gastó sus últimos pesos en un boleto de lotería que le hizo ganar casi 2 millones de euros, uno de los premios más altos de su país.
Hace 5 años, ganó la batalla al alcohol y ahora desea ayudar a gente que tenga el mismo problema, por eso creó una fundación para apoyar a personas sin recursos, indigentes y con diferentes adicciones.
No cabe duda que la suerte puede tocarle a cualquiera solo es cuestión de fe.
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